Antroposofía, ¿qué es?
Por Arturo Cervantes
Después de la ilustración y el enciclopedismo surgidos de la Revolución Francesa, las corrientes de pensamiento, en general, se centraron en un modelo casi único basado en un materialismo que descarta la cualidad espiritual del ser humano. Vendría después el modelo de evolución propuesto por Darwin y Haeckel, basado en la sobrevivencia del más fuerte y el desarrollo de una teoría que pierde sustento al no encontrar respuestas concretas y refugiarse en el eslabón perdido, perdiendo por completo el valor científico que proclama. Con estas líneas de pensamiento establecidas desde los centros de poder europeos sobre el resto del mundo, quedaron como bases del desarrollo de la cultura de los siglos XIX y XX las ideas de la mecanización, de la explotación -del hombre y del planeta-, de la especulación económica y, sobre todo, de la enajenación de las bases fundamentales que nos permiten comprender nuestra existencia humana como parte del devenir del cosmos y no asumirnos meramente como un hecho fortuito, de generación espontánea, sin sentido trascendente ni precedente.
Como una fuerza de oposición a esta corriente materialista, a fines del siglo XIX y principios del XX comenzaron a surgir diversos pensadores que buscaron por diversos medios religar la esencia humana a un proceso espiritual, encontrando eco en tradiciones orientales e indígenas antiguas, previas al desarrollo expansionista hegemónico europeo. Algunos de estos pensadores surgieron, precisamente, en el entorno de la Europa cercana al 1900, como es el caso de Goethe -naturalista y dramaturgo-, Schiller -poeta y humanista-, Beethoven -músico profundamente espiritual-, y, especialmente Rudolf Steiner, quien nació austrohúngaro el 25 de febrero de 1861.
De 1879 a 1883, Steiner cursó estudios y se graduó en el Instituto de Tecnología (Technische Hochschule) de Viena, donde estudió matemáticas, física y filosofía. En 1882, fue editor científico de una nueva colección de las obras de Goethe. En 1891, a la edad de 30 años, Steiner obtuvo un doctorado en Filosofía en la Universidad de Rostock, Alemania, con una tesis basada en el concepto del ego de Fichte, luego publicada de manera expandida como “Verdad y ciencia”. Como resultado de su trabajo para la edición de las obras de Goethe, Steiner fue invitado en 1888 a trabajar como editor general en los archivos de goetheanos en Weimar, donde permaneció hasta 1896. Además de las introducciones y los comentarios a cuatro volúmenes de escritos científicos de Goethe, Steiner escribió dos libros que forman parte de su vasta obra y, durante este tiempo, también colaboró en ediciones completas de la obra de Arthur Schopenhauer y la del escritor Jean Paul. En esos años, escribió la que consideró su obra filosófica más importante: Die Philosophie der Freiheit (La filosofía de la libertad, 1894), una exploración de epistemología y ética que propone un camino por el cual los seres humanos pueden convertirse espiritualmente en seres libres. En 1899 Steiner publicó algunos trabajos sobre la obra goetheana que la valieron la invitación a presentarse regularmente ante los miembros de la Sociedad Teosófica, convirtiéndose en secretario general de su recién formada sección alemana en 1902, sin unirse nunca formalmente a la sociedad. Varias diferencias fundamentales -como no quedarse en la fenomenología, sino ir hacia la investigación de los procesos- llevaron a Steiner a una ruptura formal en 1912/13, cuando él y la mayoría de los miembros de la sección alemana de la Sociedad Teosófica se separaron para formar un nuevo grupo: la Sociedad Antroposófica.
La Sociedad Antroposófica creció rápidamente. Alimentada por la necesidad de encontrar una sede para sus conferencias anuales, que incluían representaciones de obras teatrales, en 1913 empezó la construcción del Goetheanum, en Dornach (Suiza), con voluntarios europeos que se mantuvieron en la obra a pesar del estallido de la guerra. En 1919, el Goetheanum representó el estreno mundial de una producción completa del Fausto de Goethe. En este mismo año, se fundó la primera escuela Waldorf en Stuttgart (Alemania). Desde 1919, la ayuda de Steiner fue requerida en numerosas actividades prácticas y su actividad como conferenciante se expandió enormemente. Al mismo tiempo, el Goetheanum se desarrolló como un centro cultural de amplio espectro.
En sus primeras obras, Steiner hablaba ya de los mundos natural y espiritual como una unidad. Algunos de los temas centrales de su trabajo son:
• El ser humano como cuerpo, energía, alma y espíritu
• El camino de desarrollo espiritual
• Influencias espirituales sobre la evolución mundial y la historia
A partir de este periodo, Steiner llamó a su obra Antroposofía, enfatizando que el sendero espiritual por él promovido se construye sobre la libertad individual y el juicio independiente; Rudolf Steiner consiguió desarrollar una forma de conocimiento que permite experimentar la realidad del mundo espiritual y que está relacionada con las ciencias naturales en su solidez interior. Esta Antroposofía (consciencia de la humanidad) no sólo estimula al individuo hacia una orientación espiritual autónoma, sino que lleva consigo impulsos para todos los campos de la cultura. Ha permitido a muchas personalidades destacadas abrir nuevos horizontes hacia obras culturales e ideas. Las obras impulsadas por la Antroposofía encuentran reconocimiento en todo el mundo, especialmente desde el último tercio del siglo XX, cuando la ideología espiritual se convirtió visiblemente en algo natural. Más de 10 mil emprendimientos antroposóficos -clínicas, escuelas, granjas y residencias- gozan de amplio reconocimiento en todas partes del mundo. Constantemente se crean nuevas iniciativas culturales en focos sociales como África del Sur, América, Europa o el Oriente Medio. La Antroposofía posibilita y crea espacios a nivel mundial para el desarrollo espiritual y artístico y para el compromiso de la sociedad civil:
• La Pedagogía Waldorf
• La Medicina de orientación antroposófica
• La Agricultura biodinámica
• La Euritmia -una forma de danza de la palabra hablada-
• La Psicosofía -psicología de orientación antroposófica-
• La Ecología Social
• La Enfermería antroposófica
• La gimnasia Bothmer -que busca el equilibrio de cuerpo, alma y espíritu-
• La Odontología de orientación antroposófica
• El masaje Pressel
El sustento del desarrollo de las diversas vertientes antroposóficas es y seguirá siendo el fundamento de investigación y comprobación científica que le es inherente, así como el objetivo de generar un presente y un futuro más adecuados a las verdaderas necesidades del alma humana en nuestra Tierra.
“La Antroposofía es un sendero de autoconocimiento que quisiera conducir lo espiritual en el hombre a lo espiritual en el universo.”
Así describía Rudolf Steiner, su fundador, el concepto de Antroposofía y añadía:
“Surge en el ser humano como necesidad del sentimiento y del corazón. Y encuentra su justificación cuando consigue que se pueda satisfacer esa necesidad. Sólo puede reconocer la Antroposofía el que encuentre en ella aquello que busca a partir del corazón. Y por consiguiente, solo pueden ser antropósofos quienes sienten determinadas cuestiones sobre la esencia del hombre y del mundo como una necesidad tan vital como la que se siente cuando tenemos hambre y sed.”
2022-09-19 | 06:09:17pm